viernes, 5 de julio de 2013

No cantará el mar.


No cantará el mar cuando yo ya no esté aquí, ni mis sombras me harán ya ninguna compañía cuando yo me muera, ni tampoco las sombras de los demás, se extinguirán todas a la vez, conmigo.

Yo ya no seré nada, mi mota de arena en el desierto, ni tampoco ola en el mar, ni siquiera orilla, solo espero lucir como un estrella (solo eso) en el Firmamento de aquellos ojos que un día me vieron nacer.

Solamente.